Sí pero NO
En el proceso para tomar decisiones siempre pueden existir muchos argumentos a nivel racional, que muy a pesar deja descontento ante la inclinación de la balanza. A veces sucede que la toma de decisiones es de tipo visceral, emocional al 100% sin haber sido decantada por los indicadores lógicos que amerite la situación, y al pasar del tiempo existen arrepentimientos.