La Pedagogía Sistémica está basada en la Teoría de los Sistemas y la Ciencia Hellinger. Expone la necesidad de integrar directamente a la familia de cada estudiante en el proceso enseñanza-aprendizaje tomando en cuenta su individualidad.
Se rige por las leyes de pertenencia e integración, como parte de un todo, sistema educativo- subsistemas: centro educativo -familia – estudiante. Potenciando la sinergia que da como resultado: mayor motivación en el aprendiz, optimización de su rendimiento y por ende su aporte al resto de los sistemas a los que pertenece (familia-comunidad-escuela/colegio).
El recinto escolar contemplará como primordial objetivo acompañar el crecimiento académico y social de las familias que le han escogido conscientemente, tomando en cuenta las necesidades que denotan a partir de las dinámicas que generan.
La Pedagogía Sistémica es regida por la Ley de Jerarquía, órdenes de roles que fomentan el buen funcionamiento para todos los involucrados. Por ejemplo, los padres no pueden ser maestros o los maestros tomar el rol de padres, pues se entorpecería el avance.
Se sugiere aplicar este modelo en Familias, cuando:
• Exista acoso escolar o bullying
• Aislamiento Social.
• Bajo rendimiento académico.
• Falta de motivación al proceso de enseñanza-aprendizaje.
• Déficit de Atención. Concentración. Hiperactividad.
• Situaciones conflictivas que se repiten constantemente sin razón aparente.
• Otros.
En cuanto a la aplicación de la Pedagogía Sistémica en Recintos Académicos, se sugiere:
• Alta rotación de profesores en varias cátedras o una cátedra específica.
• Baja motivación y/o rendimiento del personal que labora, especialmente el personal docente.
• Problemas de disciplina.
• Bajo rendimiento en el estudiantado.
• Falta de sinergia entre los subsistemas.
• Poca o ninguna autoridad de las figuras jerárquicas.
• Administración.
• Sensación de urgencia.
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